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Acesse GrátisQuestões de Espanhol - Gramática
Questão 18 8555988
UERJ 2023El colonizador y el colonizado
Hace unos días leí el ensayo “Retrato del colonizado” (1957) de Albert Memmi, escritor francés.
Este trata sobre Túnez, un país al norte de África que fue colonia de Francia por 75 años, logrando
finalmente su independencia en 1956. Memmi habla de las características del colonizado, y no pude
evitar, como puertorriqueña, ver a mi pueblo reflejado. Dice Memmi que “cuando el colonizador
[5] afirma en su lenguaje que el colonizado es débil, está sugiriendo que esa deficiencia requiere
protección. De ahí se deriva la noción del protectorado”. El protectorado es la soberanía que un
Estado ejerce sobre un territorio. En Puerto Rico, todo recae sobre los Estados Unidos.
Soy libre porque tengo libertad de expresión y me puedo montar en un avión e ir adonde yo quiera,
pero no tenemos la libertad de entablar relaciones comerciales con el país que queramos, ni hacer
[10] cualquier cosa que vaya por encima de la Constitución de los Estados Unidos. Sencillamente
no visualizamos la libertad soberana porque no sabemos lo que es. Solo una minoría querría la
libertad; en otras palabras, independencia. Algunos se conformarían con una soberanía limitada,
pero la mayoría está perfectamente bien con nuestra libertad con asterisco.
Nuestra cultura es un híbrido de otras que llegaron a la isla, y todo esto aporta a nuestra identidad
[15] o falta de esta. Comencemos con los españoles, que llegaron a la isla, saquearon las tierras y eliminaron
al indígena. Ahora lo que nos queda son algunos pueblos con nombres taínos* y dos o tres parques
ceremoniales donde, más que ver al indígena como parte nuestra, lo vemos como algo fuera de
nosotros, que ya no existe.
En Puerto Rico tenemos muchos días feriados dedicados a próceres puertorriqueños, pero
[20] pregúnteme a mí quiénes fueron o qué hicieron. Mi respuesta es que no sé. ¿Pero cómo es posible?
Porque nuestra historia es contada a medias y a oscuras. El Ateneo Puertorriqueño, una de las
pocas entidades que preserva y defiende nuestra cultura, ha estado en peligro inminente de cerrar
por falta de fondos, y lo insólito es que a mucha gente no le importa si ellos desaparecen.
Sin embargo, lo increíble es que, a pesar de todos estos atentados de erradicar lo que somos, nosotros
[25] conservamos nuestra cultura y nuestro idioma y, a pesar de la influencia innegable extranjera,
seguimos conectados a nuestra esencia.
Memmi explica cómo los tunecinos lucharon para lograr su independencia. Primero, el
colonizado se acepta, abraza sus diferencias y reconoce quien realmente es. Entonces se rebela.
Puerto Rico no se rebelará. Ya estamos en otros tiempos y lo ideal sería lograr un cambio por la
[30] vía diplomática. Si el cambio es la estadidad o la independencia, no importa. Lo importante es
que finalmente reclamemos el lugar que nos pertenece en el mundo, que seamos escuchados y se
respeten nuestros deseos.
* taínos – pueblo originario de Puerto Rico.
Adaptado de tamaimos.com, 26/08/2018.
Memmi explica cómo los tunecinos lucharon para lograr su independencia. (l. 27)
En el fragmento, el verbo lograr se puede sustituir, sin alteración importante de sentido, por:
Questão 4 6636159
UFGD 2022Com base nos aspectos verbais e não verbais da tirinha, qual o significado do adjetivo “morondanga”?
Questão 15 6895601
UERJ 2022O romance El coronel no tiene quien le escriba (“Ninguém escreve ao coronel”), do colombiano Gabriel García Márquez, aborda a solidão de um coronel e sua esposa, que vivem em uma situação precária. No trecho abaixo, o diálogo do casal gira em torno da herança que Agustín, seu filho, lhes deixou.
El coronel destapó el tarro de café y comprobó que no había más de una cucharadita. Retiró la olla
del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra y con un cuchillo raspó el interior del tarro
sobre la olla hasta cuando se desprendieron las últimas raspaduras del polvo de café revueltas con
óxido de lata.
[05] Su esposa levantó el mosquitero cuando lo vio entrar al dormitorio con el café. En ese momento
empezaron los dobles. El coronel se había olvidado del entierro. Mientras su esposa tomaba el café,
descolgó la hamaca en un extremo y la enrolló en el otro, detrás de la puerta. La mujer pensó en el
muerto.
–Nació en 1922 –dijo–. Exactamente un mes después de nuestro hijo. El siete de abril.
[10] Siguió sorbiendo el café en las pausas de su respiración pedregrosa. Era una mujer construida apenas
en cartílagos blancos sobre una espina dorsal arqueada e inflexible. Los trastornos respiratorios la
obligaban a preguntar afirmando. Cuando terminó el café todavía estaba pensando en el muerto.
“Debe ser horrible estar enterrado en octubre”, dijo. Pero su marido no le puso atención. Abrió
la ventana. Octubre se había instalado en el patio. Contemplando la vegetación que reventaba en
[15] verdes intensos, las minúsculas tiendas de las lombrices en el barro, el coronel volvió a sentir el mes
aciago en los intestinos.
Sólo entonces se acordó del gallo amarrado a la pata de la cama. Era un gallo de pelea. El coronel
se ocupó del gallo a pesar de que el jueves habría preferido permanecer en la hamaca. En el curso
de la semana reventó la flora de sus vísceras. Pasó varias noches en vela, atormentado por los
[20] silbidos pulmonares de la asmática. Pero octubre concedió una tregua el viernes en la tarde. Los
compañeros de Agustín aprovecharon la ocasión para examinar el gallo. Estaba en forma.
El coronel volvió al cuarto cuando quedó solo en la casa con su mujer. Ella había reaccionado.
–Qué dicen –preguntó.
–Entusiasmados –informó el coronel–. Todos están ahorrando para apostarle al gallo.
[25] –No sé qué le han visto a ese gallo tan feo –dijo la mujer–. A mí me parece un fenómeno: tiene la cabeza muy chiquita para las patas.
–Ellos dicen que es el mejor del Departamento –replicó el coronel–. Vale como cincuenta pesos.
Tuvo la certeza de que ese argumento justificaba su determinación de conservar el gallo, herencia
del hijo. “Es una ilusión que cuesta caro”, dijo la mujer. “Cuando se acabe el maíz tendremos que
[30] alimentarlo con nuestros hígados”. El coronel se tomó todo el tiempo para pensar mientras buscaba
los pantalones de dril en el ropero.
–Es por pocos meses –dijo–. Después podemos venderlo a mejor precio.
Siguió sorbiendo el café en las pausas de su respiración pedregrosa. (l. 10)
En ese fragmento, el término destacado se emplea con un sentido que se puede definir como:
Questão 16 6895607
UERJ 2022O romance El coronel no tiene quien le escriba (“Ninguém escreve ao coronel”), do colombiano Gabriel García Márquez, aborda a solidão de um coronel e sua esposa, que vivem em uma situação precária. No trecho abaixo, o diálogo do casal gira em torno da herança que Agustín, seu filho, lhes deixou.
El coronel destapó el tarro de café y comprobó que no había más de una cucharadita. Retiró la olla
del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra y con un cuchillo raspó el interior del tarro
sobre la olla hasta cuando se desprendieron las últimas raspaduras del polvo de café revueltas con
óxido de lata.
[05] Su esposa levantó el mosquitero cuando lo vio entrar al dormitorio con el café. En ese momento
empezaron los dobles. El coronel se había olvidado del entierro. Mientras su esposa tomaba el café,
descolgó la hamaca en un extremo y la enrolló en el otro, detrás de la puerta. La mujer pensó en el
muerto.
–Nació en 1922 –dijo–. Exactamente un mes después de nuestro hijo. El siete de abril.
[10] Siguió sorbiendo el café en las pausas de su respiración pedregrosa. Era una mujer construida apenas
en cartílagos blancos sobre una espina dorsal arqueada e inflexible. Los trastornos respiratorios la
obligaban a preguntar afirmando. Cuando terminó el café todavía estaba pensando en el muerto.
“Debe ser horrible estar enterrado en octubre”, dijo. Pero su marido no le puso atención. Abrió
la ventana. Octubre se había instalado en el patio. Contemplando la vegetación que reventaba en
[15] verdes intensos, las minúsculas tiendas de las lombrices en el barro, el coronel volvió a sentir el mes
aciago en los intestinos.
Sólo entonces se acordó del gallo amarrado a la pata de la cama. Era un gallo de pelea. El coronel
se ocupó del gallo a pesar de que el jueves habría preferido permanecer en la hamaca. En el curso
de la semana reventó la flora de sus vísceras. Pasó varias noches en vela, atormentado por los
[20] silbidos pulmonares de la asmática. Pero octubre concedió una tregua el viernes en la tarde. Los
compañeros de Agustín aprovecharon la ocasión para examinar el gallo. Estaba en forma.
El coronel volvió al cuarto cuando quedó solo en la casa con su mujer. Ella había reaccionado.
–Qué dicen –preguntó.
–Entusiasmados –informó el coronel–. Todos están ahorrando para apostarle al gallo.
[25] –No sé qué le han visto a ese gallo tan feo –dijo la mujer–. A mí me parece un fenómeno: tiene la cabeza muy chiquita para las patas.
–Ellos dicen que es el mejor del Departamento –replicó el coronel–. Vale como cincuenta pesos.
Tuvo la certeza de que ese argumento justificaba su determinación de conservar el gallo, herencia
del hijo. “Es una ilusión que cuesta caro”, dijo la mujer. “Cuando se acabe el maíz tendremos que
[30] alimentarlo con nuestros hígados”. El coronel se tomó todo el tiempo para pensar mientras buscaba
los pantalones de dril en el ropero.
–Es por pocos meses –dijo–. Después podemos venderlo a mejor precio.
no le puso atención. (l. 13)
El pronombre le se refiere al siguiente término:
Questão 16 5097209
UERJ 2021Latinoamérica
Soy lo que dejaron
Soy toda la sobra de lo que te robaron
Un pueblo escondido en la cima
Mi piel es de cuero por eso aguanta cualquier clima
[5] Soy una fábrica de humo
Mano de obra campesina para tu consumo
El amor en los tiempos del cólera, mi hermano
Soy el desarrollo en carne viva
Un discurso político sin saliva
[10] Las caras más bonitas que he conocido
Soy la fotografía de un desaparecido
La sangre dentro de tus venas
Soy lo que sostiene mi bandera
La espina dorsal del planeta es mi cordillera
[15] Soy lo que me enseñó mi padre
El que no quiere a su patria no quiere a su madre
Soy América Latina
Un pueblo sin piernas pero que camina, oye
tengo mis dientes pa’ cuando me sonrío
[20] Soy el mar Caribe que vigila las casitas
Haciendo rituales de agua bendita
Tú no puedes comprar el viento
Tú no puedes comprar el sol
Tú no puedes comprar la lluvia
[25] No puedes comprar mi vida
La tierra no se vende
Trabajo bruto pero con orgullo
Aquí se comparte, lo mío es tuyo
Aquí se respira lucha
[30] Yo canto porque se escucha (vamos caminando)
Aquí estamos de pie
Que viva la América
EDUARDO CABRA, RAFAEL ARCAUTE y RENÉ PÉREZ
Adaptado de letras.com.
La espina dorsal del planeta es mi cordillera (l. 14)
En ese verso, el término espina dorsal se emplea en un sentido que se define como:
Questão 16 6615681
UFAM 3° Etapa 2021A questão se refere ao texto a seguir:
Vino con coca, el trago que se viene
En Nueva York es furor y en otros países vitivinícolas, como España, Chile o Sudáfrica, hasta tiene nombre propio. En Mendoza todavía no se impone y algunos dudan de que lo haga.
Hace algún tiempo, una publicidad televisiva puso de manifiesto esta tendencia que en Mendoza parece no encontrar todavía arraigo, ya que su impacto ha sido escaso aún. Se trata de un nuevo trago, que mezcla el vino con la bebida cola más famosa.
Y si bien en algunos puntos del país, sobre todo en Córdoba, la costumbre de mezclar gaseosa con vino - como el famoso "champán cordobés", a base de vino blanco y bebida de limón - ya es de larga data, esta combinación si se quiere exótica todavía no se ha hecho eco por estas tierras y hasta se la considera de mala calidad.
Durante la semana que pasó, el diario The New York Times llevó el tema a su tapa: el vino con coca es furor en Nueva York y se toma en los locales más exclusivos de la ciudad. La herencia habría venido desde España y más precisamente desde el País Vasco, donde el kalimotxo o calimocho se habría originado.
En una nota publicada por el diario español El País se cuenta la presunta historia de este trago que no tiene tantos años como uno puede imaginar. Cuentan que en 1972 una cuadrilla, encargada de organizar la única fiesta multitudinaria permitida por los resabios del franquismo, compró 2.000 litros de un vino proveniente de La Rioja, el cual estaba picado.
Antes de tirarlo, y para que no se desperdiciara, los hombres probaron mezclándolo con Coca Cola y el resultado fue un éxito. Se supone que los autores de este trago fueron dos miembros de dicha cuadrilla apodados Kalimero y Motxo, y de la unión de estos dos nombres nació la denominación de esta extraña (para el exigente paladar mendocino) bebida espirituosa.
Está claro que nadie, ningún habitante de Mendoza, sobre todo, "echaría a perder" un vino de más de 50 pesos mezclándolo con coca. Por ello es que quienes beben este trago aseguran que lo ideal es usar un vino de mesa o los famosos "tetras".
Aquí, en la tierra del sol y del buen vino, se ha hecho un culto del producto alcohólico de las uvas y cualquier ingrediente extra parece atentar contra la calidad y el concepto que de él emanan. De todas formas, algunos reconocen (sin dar nombres) que "lo han tomado cuando ya no quedaba otra".
El modo de prepararlo es sencillo: 50% de coca y 50% de vino tinto. Algunos aseguran que debe llevar mucho hielo y otros, que cuidan más la dieta, que la bebida cola debe ser light.
Los especialistas ven oscuro el panorama del calimocho por estos rincones del planeta. Jeremías Leiva, barman internacional y director del Club del Barman Mendoza (CDB), opinó: "En Mendoza lo que recién se está empezando a ver es el vino asociado a los cócteles. Varias bodegas lo están empezando a incorporar. Pero acá está muy fuerte la idea de que el vino es para tomar solo, no es para invadirlo con otros ingredientes".
Por eso recomendó que lo ideal para acompañar el vino es "jugar con los jugos de cerezas, de ciruela, de modo que el trago tenga cierta coherencia con los descriptores del vino para realzar una nota de manera natural. La idea no es que al vino se le meta un licor de kiwi", graficó el especialista.
Leiva, por último, agregó que en la provincia "estamos lejos de llegar a consumir vino con coca. Ni siquiera en el consumo doméstico. Lo veo distante. El público mendocino todavía no está preparado y le es muy chocante".
En tanto, los especialistas en gastronomía tampoco consideran que esta mezcla sea una buena opción para las salidas nocturnas. El chef Javier Aceña apuntó: "No creo que llegue a triunfar en bares de moda, es más bien un trago popular de peñas. El mendocino está acostumbrado y prefiere tragos internacionales de moda, como los bitter, el fernet o el mojito. Por otro lado, el vino es una bebida que todo mendocino aprecia o se jacta de conocer y apreciar, por lo que no lo mezcla y raras veces siquiera le agrega hielo".
Por el mundo y acá nomás
Pese a esto, el trago en otros países se impone. En Chile es conocido como ‘jote', en Sudáfrica como ‘katemba' y en Croacia es ‘bambus'. Por otra parte, en Inglaterra en épocas de la depresión llegó a tomarse un licor elaborado con vino barato y lo que viniera a cuento, como frutas, hierbas o lo que fuese. Es decir que, a la hora de combinar, parece que la vergüenza es lo primero a perder.
No puede dejarse de mencionar a la "sangría" como uno de los tragos a base de vino antecedentes del calimocho en Argentina. La manera más tradicional de prepararla es con vino, azúcar, jugo de limón y de naranja y trozos de estas frutas. Claro que las proporciones varían dependiendo de los comensales. Si se trata de un grupo de jóvenes, probablemente habrá más presencia de la bebida alcohólica y es esperable que haya igual presencia de conciencia para quienes manejan.
Por último, resta mencionar a aquellos que prefieren "rebajar" el vino con un buen chorro de soda (sodearlo), lo que vendría a ser algo así como el terror de los sommeliers. De todas formas, como dice el dicho, sobre gustos no hay nada escrito.
Texto adaptado de Los Andes, 22.07.2021.
No sexto parágrafo, no fragmento “Por ello es que quienes beben este trago [...]”, as palavras destacadas em negrito podem ser traduzidas em português por: