Questões de Espanhol - Gramática
¿Un error de Einstein sobre el viaje espacial?
Pensemos en 1 un par de hermanos, gemelos
idénticos. Uno de ellos consigue un trabajo de astronauta y
se aventura por el espacio profundo. El otro permanece en la
[4] Tierra. Cuando el gemelo viajero regresa a casa, descubre
que es más joven que su hermano. Esta es la paradoja de los
gemelos de Einstein, y, aunque parezca extraño, es
[7] absolutamente correcta. La Teoría de la Relatividad nos dice
que cuanto más rápido se viaja en el espacio más lento se
viaja en el tiempo. Viajar a gran velocidad a la estrella Alpha
[10] Centauri sería, por lo tanto, una buena manera de permanecer
joven.¿O quizás no?
Algunos investigadores comienzan a creer que el
[13] viaje espacial podría tener el efecto contrario. Podría hacerte
prematuramente viejo. La Teoría de la Relatividad de Albert
Einstein dice que el tiempo se hace más lento para los
[16] rapidísimos viajeros espaciales, de hecho manteniéndolos
más jóvenes. La actuación de la radiación espacial sobre los
telómeros puede invertir este efecto.
[19] "El problema de la paradoja de Einstein es que no
tuvo en cuenta la biología, específicamente la radiación
espacial y la biología del envejecimiento", dice Frank
[22] Cucinotta, jefe científico de la NASA para estudios de
radiación en el Centro Espacial Johnson. Mientras que el
astronauta gemelo avanza por el espacio, explica Cucinotta,
[25] sus cromosomas están expuestos a los penetrantes rayos
cósmicos. Esto puede dañar sus telómeros — pequeñas
"tapas" moleculares en los extremos de su ADN. Aquí en la
[28] Tierra la pérdida de los telómeros está asociada al envejecimiento.
Hasta ahora el riesgo no ha sido una gran
preocupación. El efecto en los astronautas del Transbordador
[31] o de la Estación Espacial Internacional, si hubiera alguno,
sería muy pequeño. Los astronautas viajan en órbitas que se
encuentran dentro del campo magnético protector de la
[34] Tierra, el cual repele la mayoría de los rayos cósmicos. Pero
en el 2018 la NASA planea enviar humanos fuera de esta
burbuja protectora para regresar a la Luna y finalmente viajar
[37] a Marte. Los astronautas de estas misiones podrían estar
expuestos a los rayos cósmicos durante semanas o meses
seguidos. Naturalmente a la NASA le gustaría averiguar si
[40] existe realmente o no el peligro de envejecimiento por
radiación y, si existe, cómo prevenirlo.
La ciencia comienza a abordar el tema sólo ahora.
[43] "La realidad es que tenemos muy poca información sobre la
conexión entre la radiación y la pérdida de los telómeros",
comenta Jerry Shay, un biólogo celular del Centro Médico
[46] Suroeste de la Universidad de Texas en Dallas. Con el apoyo
de la NASA, Shay y otros colaboradores están estudiando el
problema. Lo que aprenden sobre envejecimiento podría
[49] beneficiar a cualquiera, en la Tierra y en el espacio.
Internet: (con adaptaciones).
De acuerdo con las estructuras semánticas y gramaticales del texto, juzgue lo ítem subsiguiente.
La expresión “el efecto contrario” (l.13) ejerce la función de complemento directo.
T E X T O
IDENTIFICAN PARTE DEL CEREBRO QUE NOS HACE HUMANOS
Está en la parte delantera del cerebro,
justo por encima de las cejas. Allí
identificaron científicos de la Universidad de
Oxford, en Reino Unido, una región del
[05] cerebro humano única, que no aparece en el
cerebro de nuestros parientes más
cercanos, los monos.
Los investigadores de la universidad
británica compararon para su estudio
[10] tomografías cerebrales de 25 humanos y 25
macacos y observaron un área específica –
generalmente relacionada con los procesos
de toma de decisiones, la capacidad de
hacer varias tareas de forma simultánea y
[15] de anticipar estrategias -, que no está
presente en los cerebros de los monos
analizados.
“Encontramos un área en el cerebro
humano que no está bastante adelante,
[20] justo por encima de las cejas, que no
coincidía con ninguna región del cerebro del
mono, que parecía en el cerebro humano
bastante distintiva y muy diferente de todas
las regiones en el cerebro del mono”,
[25] explica Franz-Xaver Neubert, experto en
psicología experimental y autor del estudio
publicado en la revista especializada
Neuron.
“Toda clase de funciones se han
[30] atribuido a esta región, pero en general creo
que la gente tiende a pensar que puede
estar involucrada en lo que algunos llaman
multitarea (o la capacidad de hacer varias
cosas a la vez)”, dice Neubert. También está
[35] relacionada con la capacidad de planificar, o
de anticiparse a los acontecimientos, algo
que nos permite “tener en mente
estrategias que no estás usando en el
momento pero que puedes usar más tarde”.
[40] Sin embargo, otro de los hallazgos de
este estudio no se basa en lo que diferencia,
sino en lo que nos une. “Una de las cosas
sorprendentes es que encontramos enormes
similitudes en la organización de estas áreas
[45] en el cerebro humano y en de los monos”,
dice Neubert.
“Alguna gente puede pensar que el
lenguaje es una habilidad exclusivamente
humana, por lo tanto debe estar apoyada en
[50] áreas y conexiones que son exclusivamente
humanas. Pero estos resultados sugieren
que ese no es el caso, que quizás las
regiones que están involucradas en el
lenguaje de los humanos hacen algo
[55] diferente en los monos, incluso aunque ellos
no tienen la habilidad del lenguaje”, explica
el investigador.
Por lo tanto, dice Neubert, aunque se
podría pensar que estas zonas del lenguaje
[60] y la flexibilidad cognitiva – que es la
capacidad de cambiar de forma dinámica
entre una tarea y otra – son un desarrollo
absolutamente nuevo en los humanos,
según estos resultados no lo son.
Extraído de www.lanación.com.ar
Señala el uso correcto del vocablo si, con tilde o sin tilde.
Texto:
Los dos reyes y los dos laberintos
Jorge Luis Borges
Cuentan los hombres dignos de fe (pero Alá sabe más) que en los primeros días hubo un rey de las islas de Babilonia que congregó a sus arquitectos y magos y les mandó a construir un laberinto tan perplejo y sutil que los varones más prudentes no se aventuraban a entrar, y los que entraban se perdían. Esa obra era un escándalo, porque la confusión y la maravilla son operaciones propias de Dios y no de los hombres. Con el andar del tiempo vino a su corte un rey de los árabes, y el rey de Babilonia (para hacer burla de la simplicidad de su huésped) lo hizo penetrar en el laberinto, donde vagó afrentado y confundido hasta la declinación de la tarde. Entonces imploró socorro divino y dio con la puerta. Sus labios no profirieron queja ninguna, pero le dijo al rey de Babilonia que él en Arabia tenía otro laberinto y que, si Dios era servido, se lo daría a conocer algún día. Luego regresó a Arabia, juntó sus capitanes y sus alcaides y estragó los reinos de Babilonia con tan venturosa fortuna que derribó sus castillos, rompió sus gentes e hizo cautivo al mismo rey. Lo amarró encima de un camello veloz y lo llevó al desierto. Cabalgaron tres días, y le dijo: “Oh, rey del tiempo y substancia y cifra del siglo!, en Babilonia me quisiste perder en un laberinto de bronce con muchas escaleras, puertas y muros; ahora el Poderoso ha tenido a bien que te muestre el mío, donde no hay escaleras que subir, ni puertas que forzar, ni fatigosas galerías que recorrer, ni muros que veden el paso.” Luego le desató las ligaduras y lo abandonó en la mitad del desierto, donde murió de hambre y de sed. La gloria sea con aquel que no muere.
Disponible en https://ciudadseva.com/texto/los-dos-reyes-y-los-dos-laberintos/. Accsesado en 13 de ago. 2018.
En el segmento a seguir, destacado en el texto “Entonces imploró socorro divino y dio con la puerta. Sus labios no profirieron queja ninguna, pero le dijo al rey de Babilonia que él en Arabia tenía otro laberinto y que, si Dios era servido, se lo daría a conocer algún día.”, identifique la función de los elementos señalados “le”, “se” y “lo”, respectivamente.
Rescatadas de la esclavitud
A Carla (nombre supuesto) tardaron una semana en contarle que no iba a trabajar cuidando niños. Ni ancianos. Tampoco limpiando pisos, como le habían dicho. La intimidaron. Amenazaron con dañar a su familia. Le habían retirado su pasaporte brasileño con alguna excusa boba nada más aterrizar en España y ahora estaba a merced de unas personas que creyó que la ayudarían. “Nunca creí que eso me podría ocurrir a mí. Pensaba que lo que se contaba sobre mujeres engañadas era mentira”, cuenta con el gesto duro. Tenía 23 años.
La brasileña Carla estuvo unas semanas en un piso de Madrid frecuentado por hombres. Después, en Portugal. En Sevilla. Y vuelta a la capital española. Siempre en pisos, como muchas de las mujeres extracomunitarias sin papeles. Así estuvo más de un año. “Vine con una maleta llena de sueños y caí por un pozo; creí que no tenía salida”, dice arreglándose con la mano la coleta que sujeta sus cabellos oscuros. Pero, al contrario de lo que pensaba, la tuvo.
Carla ayuda hoy a otras mujeres a escapar de las mafias. Es agente social en la organización especializada APRAMP (Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida) y una de las mediadoras que ayudan a identificar a las víctimas de trata y que las asisten para que puedan rehacer su vida.
La brasileña recuerda como si fuera ayer el día que logró huir. El día de su “rescate”. Una mediadora de APRAMP le dijo que podía tener una vida diferente, que no tenía que estar allí. Le había dado a Carla un número de teléfono para emergencias, y un día que le habían dado una paliza tremenda, que le provocó graves heridas, y que creía que la iban a matar, llamó para pedir auxilio. “Yo no podía más”, cuenta.
APRAMP activó su dispositivo de rescate y Carla pasó a un piso protegido con terapia psicológica y apoyo legal. En España, apunta Rocío Nieto, presidenta de la organización que ayudó a Carla, la asistencia a las víctimas de trata está mayoritariamente en manos de organizaciones como la suya.
Carla, una vez a salvo, empezó a hacer cursos para mantenerse ocupada y a formarse para poder tener un trabajo. Estudió para auxiliar de geriatría y estuvo algún tiempo cuidando de una anciana a la que hoy considera parte de su familia. Cuando pudo, empezó a formarse como agente social para llegar a ser mediadora.
Mientras la brasileña relata su historia, se ajusta el chaleco, mira su teléfono y sale del local. Solo pasan un par de metros cuando empieza a hablar con las mujeres que aguardan en la calle a que llegue algún cliente. Las saluda. Les da su tarjeta con su número de teléfono y sigue su camino. Espera que alguna de ellas llame, como lo hizo ella un día. Y que vuelvan a vivir.
(http://politica.elpais.com. Adaptado.)
“Carla, una vez a salvo, empezó a hacer cursos para mantenerse ocupada y a formarse para poder tener un trabajo. Estudió para auxiliar de geriatría y estuvo algún tiempo cuidando de una anciana”.
Assinale a alternativa em que o trecho está corretamente reescrito em discurso direto.
Considere a figura a seguir para responder à questão.
Assinale, com base na figura em destaque, qual pessoa do discurso é utilizada no modo imperativo afirmativo.